Poso de ceniza: Pasión, desamor y herida

Posted by   lenguaverde   |   Categories :   Actualidad Lengua Verde

El amor siempre deja un sabor en la boca. En ocasiones dulce y, en otras, amargo. Una especie de poso de ceniza. El amor aviva el deseo y el ánimo pero, cuando nos falta, puede congelar hasta la última de nuestras células. El amor es la respuesta y también la pregunta. El amor, el amor… Un tema universal que no se agota nunca, pues adopta una forma diferente en cada corazón, al igual que cada poeta es capaz de modelarlo con palabras propias, a veces de plata, otras de miseria.

Israel Olivera, con su voz clara y poderosa, no ha sentido miedo ante tamaño reto. Quizá porque, como todas las personas que han vivido un ápice, él mismo ha sentido el amor y el desamor en carne propia. Hoy como un beso. Mañana como un mordisco envenenado.

Todas estas sensaciones han quedado impresas en «Poso de ceniza», su segundo poemario, que en Lengua Verde Libros tenemos el orgullo de publicar y que será presentado en la Feria del Libro de Málaga. Será el próximo viernes 6 de mayo, a las 19:00 horas en el Edificio Iniciarte de Muelle 2.

Con este volumen se inicia además lo que hemos venido en denominar «Colección Terral», una serie dirigida a un público adulto y que esperamos poder continuar en el futuro con otros volúmenes, ya sean de ficción, ensayo o poesía.

«Poso de ceniza» no es sólo un poemario. Es además un libro ilustrado, pues destacan entre sus páginas los dibujos de Elena Blanco, trazos de líneas sencillas pero cargados de belleza y significado. Y es también un fragmento de película o un estado de ánimo, pues viene acompañado por una banda sonora creada para la ocasión por Sixto Martín, componente de la banda malagueña The Loud Residents.

Israel OliveraComo bien explica su autor, Israel Olivera, el título del libro alude a «un pasado del que aún queda un rescoldo dispuesto a avivarse en el recuerdo, un poso de ceniza, producto de una brasa que brilló antaño». El momento en el que todo es posible y, a la vez, en el que sabemos que todo está perdido, en el que el pasado ya sólo puede vivir en el naufragio de la memoria.

El libro recoge 96 poemas «breves, sólidos, contundentes, que dejan poco lugar a la imaginación y que transitan entre la crudeza y cierto aire naif en ocasiones», como bien indica su propio autor.

Como despedida, ofrecemos en exclusiva dos poemas y una ilustración, que servirán seguro como aperitivo de un libro que guarda en su interior muchas aristas y cicatrices, tantas como es capaz el amor.

Sólo quiero enredarme en esa
jauría de alambres cobrizos
que devoran mis ojos de hambre.
Perderme en tu maraña de soles tardíos
sin carros de fuego ni dioses que me socorran.
Buscar entre el remolino de rojos amaneceres
para endeudar mi boca contigo.
Ya no puede más mi mirada
que se agosta, seca, sobre tu pelo rojo.

 

 

Se
clava
profundamente
en
la
ingle
una
fina
y
fría
aguja
de
acero.
Una punzada en el centro primitivo
y luego, el desvanecimiento.

27 abril, 2016